La Junta de Castilla-La Mancha niega el cierre de puntos de atención de urgencias
La directora general de Atención Primaria, Ángeles Martín Octavio, ha salido al paso de las informaciones difundidas en los últimos días por el Partido Popular sobre el futuro de la atención de urgencias en el ámbito rural. En un acto celebrado este sábado en Sigüenza, Martín Octavio ha enviado un mensaje de tranquilidad a la población, garantizando que el Ejecutivo autonómico «no ha previsto cerrar ni cesar la prestación asistencial en ninguno de los Puntos de Atención Permanente que existen en la región».
En su intervención, ha instado a los dirigentes del Partido Popular a actuar con «responsabilidad y no utilizar la sanidad como arma arrojadiza». Según la directora general, difundir informaciones «sin rigor» tiene como único objetivo «generar alarma entre la población con una prestación esencial como es la atención sanitaria».
El origen de la controversia, según explicó Martín Octavio, es una «interpretación torticera» del proyecto de Orden de modificación del Mapa Sanitario de Castilla-La Mancha, que actualmente se encuentra en fase de información pública. La directora general ha aclarado que este cambio normativo es «meramente formal y por seguridad jurídica», y que no implica la clausura de ningún centro.
Detalló que, aunque el proyecto contempla la derogación de las órdenes vigentes que regulan estos puntos, el propio texto garantiza su continuidad. La ‘Disposición transitoria segunda’ del borrador, precisó, establece que las órdenes actuales mantendrán su vigencia hasta la entrada en vigor de una nueva resolución del SESCAM que las sustituya, asegurando así que no se produzca ninguna interrupción en el servicio. Por tanto, el posible cierre de puntos de atención de urgencias queda descartado según la versión del Gobierno regional.
Finalmente, Martín Octavio ha reafirmado el compromiso del Gobierno autonómico y del SESCAM con el fortalecimiento de los recursos sanitarios. En este sentido, ha acusado a los populares de «olvidar que el único intento de cierre de puntos de atención de urgencias en Castilla-La Mancha se produjo en 2013 durante el gobierno del PP, presidido en ese momento por María Dolores de Cospedal», contraponiendo aquella gestión con la actual.